15/05/2025

SANTOÑA-EL BUCIERO-NOJA-EL BRUSCO-ARGOÑOS-MARISMA-SANTOÑA

Este es otro de los tramos de la costa de Cantabria más especiales: no solo es bonito, con vistas espectaculares, sino que además, desde alguno de sus puntos se pueden hacer otras rutas también muy interesantes y que os iré recordando cuando pasemos por la zona. 
Nosotros comenzamos la ruta en Santoña, junto a la iglesia de Santa María del Puerto, donde aparcamos, y buscamos el inicio de la ruta del Faro del Caballo, muy famosa, que vamos a compartir en un primer tramo y que queda por detrás de la iglesia, adentrándonos en el Monte Buciero.
Enseguida encontramos el Fuerte San Martín, construido en el S.XVII, a la entrada de la bahía de Santoña, dominando el canal de entrada al puerto y a la parte antigua de la villa de Santoña.  Aunque esta es la entrada principal, no se accede por aquí, se hace por la terraza, subiendo la cuesta:
Hoy es propiedad del ayuntamiento, declarado Bien de Interés Cultural y sede de la Escuela-Taller de Rehabilitación del Patrimonio:
En los fines de semana de verano se puede visitar. Supongo que será interesante, intentaré hacerlo este verano, junto con una representación teatral napoleónica que aun me parece más atrayente:
Seguimos la ruta, pasando junto a un cartel informativo de las rutas posibles dentro del Monte Buciero. Por la izquierda podemos comenzar (o terminar) una ruta por los 4 picos del Buciero, una de mis próximas rutas, que sube a la Cruz y al vértice geodésico Ganzo.
Pero nosotros continuamos por la señalada como la del Faro del Caballo, bordeando la costa. En cuanto cogemos un poco de altura, esta vista del Puntal de Laredo de frente y de la playa de Santoña a nuestros pies:

El monumento a la Virgen del Puerto también a un nivel inferior:

Nosotros continuamos por el sendero a la sombra, con calor, se agradece:
A veces, el sendero se abre al mar, con estas vistas sobre el puerto deportivo de Laredo con varios picos por detrás en los que hemos estado: la ermita de las Nieves (el más puntiagudo en el centro de la foto), el alto de Guriezo, el Ventoso,...:

Ahí debajo se supone que está la playa Redonda😮:

Continuamos por la fresca senda. Creo recordar que ese árbol caído y cruzado, que he visto varias veces que he pasado por ahí, ya está muy cerca de la desviación hacia las escaleras que bajan al Faro del Caballo (está indicado). 763 escalones😳, pero merece la pena el esfuerzo:
En esta ocasión no bajamos, nuestro objetivo era otro, así que continuamos la senda, que en algunos puntos se complica un poco, el suelo ya no es tan plano ni lisito, pero, con cuidado, se pasa sin problemas:
Cruzar un monte tan cerca del mar.... es un privilegio:  
Y así, bordeando el monte Buciero llegamos al faro del Pescador, hoy cerrado al público:
Y ya salimos a una carretera asfaltada con vistas a Noja y al Cabo de Quejo, ya en Isla, al fondo:
Y bajando por esa carretera, a veces empinada, llegamos a ver la cárcel del Dueso desde arriba, en medio de lo que parece un entorno maravilloso, rodeado de mar, de marisma, de monte:
Pero bajando y cambiando de ángulo, ya se aprecia la dureza de un centro penitenciario: altos muros, concertina de afiladas púas,..., y  eso ya no mola tanto:
Bajamos hasta el mismo borde amurallado del penal, con el cementerio de Santoña y un camping al otro lado de la carretera:
Comenzamos a atravesar la separación entre el monte Buciero y el Brusco (en la foto, de frente, al fondo), por senderos paralelos a la playa de Berria, unos 2 km: 
Y mirando para atrás, la imagen de lo que acabamos de bordear, con parte del camino que acabamos de recorrer por el Buciero, en su cara oeste, hasta bajar al Dueso:
Al final de la playa comienza otro sendero para subir al Brusco. Enseguida cogemos la suficiente altura para  tener esta vista sobre la playa de Berria:
Seguimos subiendo:
Desde arriba ya vemos las playas del otro lado, Helgueras y Trengandín, en el municipio de Noja:
Bajamos hasta la playa, caminamos un poco por la arena y enseguida nos salimos para coger una pista que llega hasta el pueblo. Pero nosotros dejamos de nuevo el asfalto a la altura de las ruinas de la ermita de San Nicolás:
Nos adentramos otra vez en el monte Mijedo (ya hicimos otra ruta por este monte, os lo conté aquí):
Donde la vida, el color,..., nos alegran el alma:
Donde los caminos, aunque ahora descienden, nos mantienen en forma 😅😉:
Y de donde todavía es posible salir y sonreír: 
¿O no os parece que ver esto provoca un subidón de energía?
Hemos bajado hasta Argoños y tenemos que regresar a Santoña. Para facilitar el tránsito, una valla así nos da seguridad:
En lugar de ir por la carretera que viene de Santander por la costa, nos metimos por una local que cruza por el medio de la marisma y la ría de Argoños, pasando por el Mirador de El Gromo:
Seguimos por un paseo peatonal muy agradable:
Cruzamos el puente, próximo al puerto pesquero de Santoña, donde los pequeños barcos se alinean ordenadamente, atados a cuerdas:
Y, callejeando,  llegamos a nuestro punto de partida, la iglesia de la Virgen del Puerto:
Por último y como siempre, acompaño este reportaje de un mapa orientativo que, como siempre digo y sobre todo cuando pasa por montes o bosques, no será muy exacto, pero sirve para hacerse una idea. La ruta no tiene pérdida, está señalizada con todas las opciones posibles. A nosotros nos salieron unos 18 km, pero existe la posibilidad de hacer solo la vuelta al Buciero que ya es muy bonita:

07/05/2025

NOJA: PLAYA DE RIS- PLAYA JOYEL

Como decíamos ayer (aquí concretamente )...., mis playas preferidas, en Cantabria, están en Noja: además de tener bandera azul, sinónimo de calidad medioambiental, son muy bonitas, entretenidas, de arena finísima y dorada, muy largas,..., Si tuviera que poner un 'pero' diría que hay mucha gente en fines de semana, bueno, comparando con lo que yo conocí de estas playas, aunque nada que ver con Benidorm, la verdad...
Empezamos a frecuentar esta playa de Ris cuando mi hija era pequeña (primero íbamos a las de Somo, Loredo, Langre, Galizano,..., que están más cerca), pero con ella nos resultaba más fácil, cómoda y accesible esta playa y, precisamente en la parte que se ve en la foto anterior, es donde siempre nos bañábamos. ¿Os habéis fijado en esas aguas? ¿no os parece un lujo?
Hace unos años, debido a la afluencia de gente, ya resultaba casi imposible aparcar en esta zona, comenzaron a regular el aparcamiento💰y decidimos irnos a la otra playa, a la de Trengandín donde era más fácil aparcar, pero a esta de Ris la tengo un especial cariño,...
También tiene rocas, rincones para explorar:
Donde entretenerse con los niños buscando cangrejos, lapas,... y enseñarles el respeto que se merecen:
En la parte oriental de la playa de Ris, bajando por la cuesta junto al muro,  de frente hay una línea de peñones o islotes: el islote de Oliva, el de San Pedruco y el Peñón del Águila, más pequeño. En esta foto se ve el de San Pedruco y el del Águila, al fondo:
Este otro es el islote de Oliva, al que se puede acceder andando con bajamar, cuando el agua se separa un poco más de lo que se ve en la foto. Hay restos de una langostera. Yo estuve hace muchos años, resquilando y saltando😅:
Las rocas, como siempre, me obligan a atar en corto mi imaginación, porque... ¿soy yo la única que ve un camello con sus 2 jorobas, tumbado con las patas estiradas? Me temo que sí, por lo menos Angelines, que venía conmigo, no lo veía 😏:
El más grande de los peñones es el de San Pedruco, al que sólo se puede acceder con embarcación. En lo más alto está la ermita rodeada de gaviotas e higueras, y que ha sido restaurada recientemente:
Entre cualquier roca encontramos resquicios con vistas, a través de los que poder asomarnos y maravillarnos:
En el suelo rocas que apenas asoman para ver la luz, rodeadas del líquido elemento, vida a su alrededor:
Otras veces, la vida se adhiere como lapas (😉) para disfrute de los más pequeños. Este es el límite con Isla, donde la ría de Cabo Quejo separa a 2 municipios y a 2 playas, la de Joyel (o Cuarezo) y la pequeñita de los Barcos en la parte de Isla (Arnuero). Por aquí, con bajamar, se puede cruzar de una playa a otra. El problema viene cuando sube la marea... hemos visto mil situaciones de gente queriendo regresar a la parte de Isla con la ropa encima de la cabeza y de puntillas cruzando la ría, en barca,..., un lío para la gente que no lo sabe y les pilla la pleamar en la playa equivocada😅:
En esta ría de Cabo Quejo (o Queja 😏) lo hemos pasado en grande: veníamos andando desde la playa de Ris, desde su parte más oriental, y dependiendo de cómo estuviera la marea, nos metíamos al agua dejándonos arrastrar hasta las rocas que hay un poco antes de desembocar en el mar. La gracia era, además, pasar entre 2 peñascos, donde más profundidad había... qué tiempos aquellos! 
Este día la marea estaba baja, el agua fría, yo mayor,..., pero la estampa igual de bonita:
Seguimos el curso de la ría, por la orilla, acercándonos un poco más a la marisma de Joyel, con la Casa de las Mareas al fondo y el monte Cincho (en la foto, a la derecha, os conté otra ruta que hicimos pasando por esa parte y subiendo al Cincho aquí)
Echando de nuevo la vista atrás, esto:
De regreso, no me pude resistir a hacer la foto de la torre de los socorristas en la playa de Joyel:
Y de las Uñas de León (en grupos de 3 o por lo menos impares, que mola más 😂):
Y así llegamos al paso entre las 2 playas, Joyel y Ris, entre los campings y un islote. Lo llamábamos el paso del desierto: es estrecho y en verano la arena arde, teníamos que llevar las chanclas solo para pasar ese tramo o lo hacíamos corriendo, nos quemaba los pies:
Y llegamos de nuevo al otro extremo del Ris, donde el muro del hotel Pineda Playa. Antes de subir ya al coche, todavía nos dio tiempo a ver cómo disfruta la gente de un mar que ese día estaba como un plato: 
Esta chica, a cuya pareja pedí permiso para hacerle fotos, me regaló esto:
Y esto...:
Finalmente, adjunto un mapa orientativo del paseo, no se le puede llamar ni ruta, unos 5 km de paz, de olor a mar, de color, de bonitas sensaciones,...:
¿Y vosotr@s? ¿tenéis una playa preferida en el mundo? Contadnos cual es, que si no la conocemos, intentaremos hacerlo!!!