31/07/2025

PICO SAN CARLOS- SAGRADO CORAZÓN -LIÉBANA, CANTABRIA

En esta ocasión decidimos ir al Pico San Carlos también llamado del Sagrado Corazón, ya imaginaréis el motivo... Sí, en el año 1900 colocaron una imagen del Sagrado Corazón de bronce, de 1 m de altura, en lo alto del Pico San Carlos, en la comarca de Liébana. Y justo al lado está uno de los objetos más perseguidos por mí últimamente: un vértice geodésico que marca los 2211,50 m de altitud. Es el cuarto más alto de la comunidad de un total de 112 que hay en Cantabria.

Con la previsión meteorológica muy presente y tempranito por la mañana, nos pusimos en marcha hacia Sotres, en Asturias. Ya habíamos estado por ahí en otras rutas, pero siempre me sorprende, como si fuera la primera vez (mi marido dice que lo mío es una suerte, que siempre estoy viendo sitios nuevos... yo no estoy tan segura, mi problema es mi memoria, puedo reconocer una piedra y no acordarme de nada más 😕)...

Llegamos a Sotres, continuamos unos 3 km más en dirección a Tresviso hasta llegar al parking que hay en Jito Escarandi para comenzar la ruta andando hacia el refugio del Casetón de Ándara, unos 4 km subiendo por una pista cómoda. Viendo ahora esta foto ya reconozco algunos de los picos que se ven en ella, el Mancondiu (el más alto, detrás queda el San Carlos), a su izquierda el Samelar y a su derecha, el piquito, el Castillo del Grajal: 


Lo que nos rodeaba era como sacado de un cuento: el Canal de las Vacas que baja desde el Casetón de Ándara hasta la majada de la Jazuca (las cabañas donde se recoge el ganado por la noche o en invierno):

Por debajo de unos railes con una vagoneta encima, entramos a una zona minera, donde a mediados del S. XIX se encontraron importantes yacimientos de cinc que se cerraron definitivamente en 1975. Hoy son las mejor preservadas de Picos, conservándose uno de los casetones mineros como refugio de montañeros, precisamente ese que está contra la pared, el Casetón de Ándara (y sí, por la pista pueden subir coches, mejor si son 4X4, que hay algunos baches interesantes, pero creo recordar que desde el aparcamiento estaba prohibido el paso a vehículos no autorizados):
Descansamos un poco en el Casetón, viendo de dónde veníamos. En la foto, por el sendero de la izquierda. Todavía no sabíamos que seguiríamos y terminaríamos por la pedrera con sendero que se ve a la derecha, aunque en distintas direcciones 😓:

En efecto, empezamos subiendo por esa senda hacia la parte de arriba del refugio. Al principio tuvimos alguna duda porque hay muchas opciones, pero enseguida cogimos la buena:

Y así empezó la fiesta. Bordeando el pico (o pica) Mancondíu, que está justo detrás y encima del refugio, por el collado (o collada) de Trasmancondíu girando después hacia la derecha. Enseguida tomamos una pista ancha, pero un poco más adelante, el track que llevábamos nos desvió otra vez a la derecha, pero enseguida nos dimos cuenta que por allí era un poco complicado y enlazamos con la pista principal.
A nuestro alrededor rocas de todos los colores, hoyos, restos de las minas de la Providencia y de Mazarrasa:

Mirando hacia atrás se ve el camino recorrido, con sus vueltas y revueltas (por ahí vimos a un hombre que subía corriendo desde la Fuente de la Escalera hacia nosotros, gritándonos. Le esperamos y era para preguntarnos por el refugio, que se había perdido. Era francés, no nos entendíamos, al final en inglés pudimos ayudarlo, que estaba un poco estresado):

El Mancondíu en el centro. Detrás, por su izquierda, está el Casetón de Ándara y al fondo un mar de nubes que estuvo allí todo el día ( y debajo de las nubes el mar Cantábrico:

Continuamos la ascensión hasta el collado San Carlos, entre el pico Samelar y el San Carlos, que nos permite unas vistas hacia la entrada al valle de Liébana por el Desfiladero de la Hermida, con la sierra de  Peña Sagra por encima y las sierras de Peña Labra e Hijar al fondo:
Por el camino alguna boca de mina:
Y llegamos al pico donde se encuentra el ansiado vértice geodésico y el Sagrado Corazón. Estamos en el macizo oriental o de Ándara de Picos de Europa, seguramente en su pico más emblemático:
Una sensación muy extraña me invadió... Allí arriba todo estaba torcido. Al vértice solo le faltaba un empujoncito para caer al vacío:
Y al vacío sería difícil sobrevivir, estamos a más de 2000 por encima de Potes, que podemos ver allí abajo... espero que ahora, que se celebra la subida en peregrinación al Sagrado Corazón (el próximo domingo por cierto, el primero de agosto de los años terminados en 0 o en 5), lo hayan reparado, estaba completamente suelto e inclinado:
El Sagrado Corazón que ahora vemos allí no es el original. El primero que pusieron en 1900 fue la diana de varios rayos y ahora está expuesto en el Centro de Interpretación de Picos de Europa en Tama y en 1995 pusieron este, sobre un pedestal de casi 3 m de altura. Al principio, la peregrinación se hacía cada 10 años, pero a partir de 1965 se comenzó a hacer cada 5. Es, seguramente, el punto de peregrinación más alto de España:
Entre ambos pedestales yo pensaba en lo que tiene que ser eso el día de la fiesta, lleno de gente que sube a una misa por la mañana para después bajar a las Vegas de Ándara y continuar la celebración con comida, música, baile,...:  

Desde allí, distinguimos Potes, Turieno, la subida al Monasterio de Santo Toribio de Liébana, la carretera que llega a Fuente Dé,....:
Volvernos a fijar en los pueblos de la comarca de Liébana era inevitable, reconociendo algunos y colocando otros con la ayuda del Google Maps:
Comenzamos el retorno, viendo enfrente el Pico Samelar, un poco más alto que el San Carlos (no entiendo por qué el vértice está en el San Carlos 😏) que decidimos no subir, nuestro objetivo era este:
El collado de San Carlos lucía sus más atractivos colores:
Seguimos bajando:
Sintiéndonos  hormiguitas:
Pero disfrutando de cada pico, pudiendo comprobar más tarde, ya en casa, el nombre de cada uno, en este caso y empezando por la izquierda, la Junciana, la Rasa de la Inagotable 😳 y el Castillo del Grajal:
Volvimos hasta el collado de Ándara, pero en lugar de ir hacia la izquierda por el collado de Trasmancondíu (por donde habíamos venido), seguimos de frente por la pista principal y enseguida encontramos una fuente (sin agua): 
Continuamos por la pista, zigzagueando, hasta llegar a un punto, pegado a la montaña, en el que teníamos 2 opciones, o seguir por la pista y al llegar a Vao de los Lobos (mucho antes de llegar a Bejes) seguir por la derecha hacia el parking de Jito de Escarandi (donde teníamos el coche) o seguir bordeando el Mancondíu para llegar en 1 km al Casetón de Ándara y eso hicimos. Nos pareció que seguir por la ruta de Vao de los Lobos era ya demasiado larga (buena decisión, que suponía otros 11 km en lugar de los 5 aprox. por el Casetón, y ya llevábamos lo nuestro 😅):
El siguiente km nos dio mucho de sí, íbamos cambiando de tipo de paisaje, viendo de frente la pista por la que empezamos hacia el Casetón, con el mar de nubes al fondo:
Ya se iba acercando  el refugio:
Ya estábamos cerca del Casetón, pero antes, para mí, una cura 😟... Pude pasar por aquella pedrera, que fue lo primero que vi por la mañana cuando subíamos. Sí, pasé, sin más, intentando no pensar:
Y llegamos al refugio:
Descansamos un poco hablando con una pareja que llevaban días por allí, y comenzamos a bajar:
Nosotros por la pista. En la foto, a la izquierda, el comienzo de la Canal de las Vacas:
Un vistazo hacia atrás y de nuevo el Mancondíu con  el sendero por el que lo habíamos bordeado, el Samelar por detrás, a su izquierda, y el Canal de las Vacas bajando hacia el fondo de la foto:
   
Caballos, yeguas y potros felices:
Y, por supuesto, no podían faltar las flores silvestres, taaan bonitas. He preguntado a mi IA preferida y me dice que son androsace villosa (la rosa), aquilegia caerulea (la azul) y saxifraga granulata (la blanca):
Terminando la ruta, viendo ya el coche:
Y sobre todo un apacible paisaje, con el conjunto de cabañas que forman la majada del Hoyo del Tejo:
Fueron unas 7 horas de ruta, con un desnivel de 1270, llegando a 2211,5 msnm en el Pico San Carlos y unos 18 km caminados, con esfuerzo, sí, pero más que nada por la longitud, no tiene dificultad si vas por las pistas principales. 
Como siempre, dejo el mapa orientativo y aproximado:

26/06/2025

PLAYA DE LOS TRANQUILOS- PLAYA DE LOREDO- PUENTE DE SOMO


Hoy comienzo esta historia desde una playa que, sin duda, está en un lugar privilegiado de la costa de Cantabria. Creo que esté en el top 3 de las preferidas de mi hermana (no me extraña). Transmite calma, paz, serenidad,... es la playa de Los Tranquilos.
Debido a que son las playas más cercanas a mi casa, tengo muchas fotos de la zona, hechas a distintas horas, con diferentes estados del cielo, así que puedo intercalar alguna que no se corresponde con la hora a la que hice la ruta andando, como es el caso de la siguiente foto, hecha desde esta playa en el momento de una puesta de sol sobre la ciudad de Santander, que siempre es un espectáculo:
Desde la parte más occidental de esa playa de los Tranquilos se suben unos 'escalones' de roca y arena, se atraviesa un pequeño bosquecillo, una zona dunar y enseguida esas serenas aguas a nuestros pies y la playa de Somo al fondo:

Avanzando un poco más ya tenemos la vista completa de la playa de Loredo, la de mi infancia, normalmente muy tranquila, con una zona de rocas (las que se ven en la esquina inferior de la derecha) donde se formaban pozas cuando bajaba la marea, lo cual la hacía muy entretenida, sin peligro. Lo pasé muy bien allí...:
Seguimos avanzando. Otra vista del arenal:

Pasada la entrada principal a la playa de Loredo, con un amplio aparcamiento, comienza el primer tramo de pasarela de madera:

Más adelante hay otros tramos de pasarela que han tenido que ir renovando porque, a veces, algún temporal se los lleva. Son importantes para evitar dañar la zona dunar. En algunos puntos esa pasarela longitudinal tiene salidas (o entradas) a la playa: 
Con vistas como estas, con la isla de Santa Marina y el mirador de los Tranquilos al fondo, la playa de Loredo en todo su esplendor y el pequeño río de Castanedo aportando sus aguas al mar:

Esta ruta se puede hacer por la playa (salvo un tramo entre los Tranquilos y Loredo si la marea está alta), pero yo ese día fui por las pasarelas lo que pude y por senderos por detrás o por encima de la playa, siempre respetando la zona:
Al pasar lo que llamamos la curva, entre las 2 playas, se vuelve a atravesar otro bosquecillo, con su maravillosa sombra:

Con senderos que te elevan lo suficiente como para ver esto, las playas, las dunas de la curva de Somo-Loredo y por detrás, la pasarela:

Avanzando entre caracolas:
Sin poder evitar asomarme a cualquier mirador de mi playa de referencia:

Desde donde también pasear la vista por la costa de Santander, con sus 2 faros, el de cabo Mayor y el de Mouro:

Nos acercamos a la playa de Somo y al pinar de Arna:

Cualquier 'rabo de zorro' nos sirve para enmarcar el islote la Corbera donde se asienta el faro de Mouro:
Los carismáticos y espigados pinos nos cuentan dónde estamos, sin dudas. Mirando desde la playa de Somo, son inconfundibles:
En frente, el Palacio de la Magdalena. Sí, entre los pinos:
Al final del sendero, Somo. Llegamos (más o menos) a la pista de Skate y el parking de Somo:
A partir de ahí, callejeando por la zona más comercial del pueblo (restaurantes, bares, negocios de surf,...), volví a tomar el paseo que, bordeando las dunas, llega hasta el embarcadero:
El puente sobre la ría de Cubas, que separa Somo de Pedreña, bajo el cual recorren sus últimos metros las aguas del río Miera:
Y sí, ya estamos en el muelle de Somo, en el embarcadero de donde acaba de salir una barca de los Reginas, la cual, llegará hasta Santander, parando también en Pedreña:
Aquí no me queda más remedio que poner esta foto que hice ese mismo día pero mucho más tarde, cuando ya volvía a casa. Y es que ese puente de Somo, ese muelle, con  la escultura 'Los Adioses', despidiendo durante todo el día a tantos pasajeros y peregrinos, es bonito a cualquier hora:
Otro día, estuve paseando por la parte alta de Somo, lo que llaman Somoboo, desde donde se tiene otra perspectiva de la zona, con el Embarcadero del Rey a esta otra parte del puente:

También desde este alto se ve el Puntal en su conjunto, apreciando el extra de encanto que da a la bahía de Santander, al fondo:

Detalle del final de la lengua de arena. Casi en la punta está el embarcadero donde cada verano las lanchas de Los Reginas llegan cargaditas de santanderinos para pasar un bonito día de playa:
Volví otra vez a Los Tranquilos, donde tenía el coche, y esperé un poco para ver esta puesta de sol, que llenó la playa de preciosos reflejos (después pararía en el puente de Somo para hacer la foto de 'Los Adioses'): 
Finalmente, añado un mapa orientativo de la ruta, pero teniendo en cuenta que al pasar por los bosquecillos al principio y al final de la ruta, no se ven los senderos por lo que es aproximado. En total fueron casi 10 km, ida y vuelta, pero muy fáciles, os animo a hacerlo: