En esta ocasión, optamos por una ruta de montaña que, por las fotos que había visto, pensé que sería bonito verlo en invierno... y fue una elección acertada, creo que es uno de los paisajes más bonitos que he visto (y he visto alguno, que aquí, en Cantabria, hay muchos y todos espectaculares).Dejamos el coche junto al consultorio médico (en el google maps está señalado como cajero). Comenzamos a caminar por una carretera que pasa junto al Camping Lunada y que enseguida empieza a tomar altura. Pasamos junto a la ermita de San Antonio:
Se continúa por esa carretera y 1 km aproximadamente después de haber dejado el coche, nos encontramos con un cruce: para Calseca o para Valdició. Nosotros vamos para la derecha, dirección Valdició.
Enseguida tomamos altura 😅 y las vistas ya son espectaculares:
La ruta se hace en su mayor parte por carreteras de montaña y, a mí, que eso no me suele gustar mucho, en esa ocasión, ni me importó. Es que no miraba para el suelo. Lo que me rodeaba era taaan bonito...:
A veces las masas rocosas imponían con su presencia:
A los 3 km ya estábamos en Valdició. Nosotros, en el cruce nos fuimos por la derecha, pasamos unas casas y seguimos tomando altura. El valle de Soba ante nosotros:
Por encima de todas aquellas montañas, se alcanza a ver el mar:
Por el otro lado hayas, con un garbanzo negro, digo blanco 😄, entre ellas:
Cualquier esquina es un mirador:
Aunque dicha esquina formaba parte de una cabaña en no muy buenas condiciones...:
También es verdad que había otras peores:
Nuestro destino era este, el Cueto los Cabrones:
Habíamos subido por prados hasta alcanzar la base de este pico (pico de la Maza, 998 m de altitud) y desde allí, cumbreando, subimos al Cueto los Cabrones, que está seguida:
Las vistas son espectaculares. En esta siguiente foto, por ejemplo, en la carretera que se ve más arriba lleva al alto del Caracol, que une los valles del Miera y del Pisueña, o sea la que va de San Roque de Riomiera a Selaya. La otra carretera de curvas que se ve más a la izda. pasa por distintas cabañas convertidas en alojamientos turísticos rurales, que por esta zona hay muchas. Nosotros estamos, más o menos, encima de la Vía Ferrata de la Concha:
Comimos en lo alto del Cueto a 1052 msnm y se puede seguir por la cumbre hasta otro alto que está seguido y un poco más bajo, pero nosotros, desde el Cueto los Cabrones que es el de mayor altitud, ya nos bajamos. Las vistas para esta otra parte... pues ya veis... se alcanza a ver la bola-radar del ejercito del aire (Escuadrón de Vigilancia Aérea nº 12, el EVA 12), ubicado en el Picón del Fraile, encima de Lunada, entre Burgos y Cantabria:
Vista de Valdició, un verde oasis:
Y ya continuamos bajando, algunas veces pasando junto a cabañas, la mayoría parecían abandonadas:
Con algunos testigos de excepción:
Hasta que ya llegamos a una pista que nos enlazó con la que subimos:
Pasamos por zonas que a mí me encantaron, preciosas para verlas así, de paso, pero que para vivir me parecen muy duras:
Y ya, una vez que cogimos la pista de bajada, enseguida llegamos a Valdició y, al pasar por el cementerio ya sabíamos que la ermita de San Antonio estaba cerca y cruzando el Miera estábamos en el coche de nuevo.
Anduvimos unos 14 km, con un desnivel de algo más de 800 m, que no es poco, pero a mí no me pareció difícil. Recomiendo hacer esta ruta en invierno, sin nieve, con buen tiempo, claro. He visto fotos de verano y no es ni parecida. Los colores marrones, ocres,..., la falta de hojas en los árboles... le dan un punto muy especial. Insisto, es una de mis favoritas.
Dejo un mapa orientativo:
